El pasado año Italia ha sido uno de los países europeos con menor número de ventas de coches eléctricos. Apenas 2.600 unidades que podemos comparar con las 3.900 de España, o las 8.000 unidades de un mercado mucho más pequeño como Suiza. Por supuesto muy lejos de los líderes, como son Noruega, Holanda, Alemania o Reino Unido.

Pero el nuevo gobierno de Italia, el Movimiento Cinco Estrellas, se ha propuesto llevar a Italia de la cola a la cabeza del mercado. Y para ello están diseñando un documento que esperan de como resultado un programa de ayudas extremadamente ambicioso en objetivos, y también en dotación económica.

La idea es poner en marcha un sistema que entregue ayudas para la compra del vehículo, siguiendo el modelo de Francia en el que se dará una parte por la entrega de un viejo coche diésel. El objetivo, llegar a 1 millón de coches eléctricos vendidos hasta 2022. Una cifra realmente ambiciosa. Para ello hará falta dinero, mucho dinero. Según las fuentes del gobierno, la cifra del proyecto, que además supondrá extender las redes de recarga, podría ascender a una cifra ligeramente por debajo de los 10.000 millones de euros.

Pero los expertos no tienen muy claro que Italia pueda lograr poner en la carretera 1 millón de coches eléctricos en los próximos cinco años. Incluso añadiendo híbridos e híbridos enchufables, indican que hará falta lanzar un proyecto que contemple ayudas de hasta 10.000 euros, y también beneficios fiscales y de otra índole. Tal como ha sucedido en Noruega.

Además desde las administraciones deben afrontar con seriedad el tema de la infraestructura de recarga. Como ejemplo el ambicioso proyecto de la eléctrica ENEL, que hace unos meses puso sobre la mesa un proyecto para invertir 300 millones de euros en el desarrollo de una amplia red de recarga. Pero los problemas burocráticos y de regulación han puesto un freno importante a este despliegue.

Así lo indica Francesco Venturini, jefe de Enel X, la unidad de negocios responsable de los coches eléctricos de la eléctrica. “Sin unas líneas y una visión claras desde el gobierno, esto es la selva. La industria automotriz se está preparando para este cambio, pero sería bueno tener una visión común desde el gobierno“.

El cambio en Italia

 

Pero son pocos los que dudan de que Italia al igual que otros mercados de Europa, está cerca del cambio. Hay avisos como los anuncios de ciudades como Roma o Milán de prohibir la entrada de coches diésel en el centro. También el anuncio del grupo FIAT, hasta ahora contrario al coche eléctrico, que en su última junta de accionistas han anunciado un plan de inversión de 9.000 millones de euros para desarrollar su gama eléctrica.

Aspectos que animan a la puesta en marcha de un programa de ayudas que aunque peque de optimista, sin duda marcará un punto de salida clave para un mercado potencialmente enorme, pero que hasta ahora ha estado inexplicablemente a la cola de ventas en Europa.

Fuente: forococheselectricos